domingo, 28 de febrero de 2010

martes, 23 de febrero de 2010

El goleador - parte I

- No te rías, no te estoy jodiendo; en serio vengo del futuro. ¡Ahí no existe esto! ¡No hablamos, no nos vemos, no... nos tocamos!
- Ajá, está bien... juguemos a eso si querés. Contame entonces... ¿Qué música escuchan? ¿Hay música?
- Emm... tenemos toda la música que haya sido hecha alguna vez, y después están unos programas que seleccionan canciones o componen combinando sonidos, de acuerdo a categorías que vos ponés. Qué sé yo... por ejemplo, si seleccionás las opciones "rock", "futuro" y "cine", lo más probable es que empiece a sonar "jonnhy b. goode"... o, cuando vuelva y cargue en el programa esta experiencia, este tema que está sonando ahora acá, je... ¿qué es?
- Ja ja ja... "The stars of Tracks and Field", de Belle and Sebastian... Me esperaba algo más loco del futuro... ¿No nos dominan los chimpancés?
- No, no... no existen más. Fue todo eliminado, justamente por miedo a que acontezca algo de eso que decís en chiste. Por eso también vivimos desconectados, en un mundo absolutamente artificial. Todo fue, todos fueron... corregidos. El mundo como lo veían ustedes, si hubiera seguido así, habría terminado antes de que yo nazca. Así que no hay nada vegetal, ni animal, y bueno, viendo cómo se trataba la gente acá, los humanos muy humanos no quedamos tampoco... pero todo es seguro y previsible, no hay peligro...
- ¿Y por qué harías esta riesgosa visita? ¿Me tenés que salvar de algo? Ja ja ja.
- Ja ja no, en realidad fue sin querer... fue un error de cálculo. Yo quería viajar al futuro. A mi futuro, je, al futuro de tu futuro. De todas formas es una buena pregunta, ya hace tres semanas que estoy acá, y no me siento para nada mal, pero me lo imaginaba muy distinto. Por lo que tenía entendido, ustedes se exponían todo el tiempo a las más variadas formas de muerte. Ingestas excesivas, ayunos excesivos, trabajo, ¡sexo! ¿Cómo es eso? ¿Cómo podían hacer... eso? Acerca de eso sí que tengo muy poca información.
- Guau, me preguntaba cuánto tardarías en llegar a ese tema, ja ja ja. En fin, para desilusión tuya, es i-nex-pli-ca-ble. Te recomiendo que hagas una investigación de campo, o una observación participante, como quien dice. Y que no me tomes por tu conejilla de indias. Ya lo fui para personas de tu pasado, mi presente. No more, Jack. Hit the road. ¡Chau, suerte en tu expedición! ¡Saludos a los extraterrestres!
- Pará, pará. ¿Dije algo malo? Es cosa seria nomás, ¿eh? Me parecía. No sé si quiero contagiarme de eso. Sólo me daba mucha curiosidad, lo poco que sé es que eso casi movía toda la vida de ustedes, y no me lo explico. Nosotros estamos tan felices sin esa amenaza...
- ¿Entonces no querés tener sexo conmigo?
- ¡Ni loco! ¡Ni con vos ni con nadie! Sólo quiería averiguar de qué se trataba.
- Ja ja ja, no te creo, pero bueno, si vos decís... sos simpático... es más o menos así: se ponen uno enfrente del otro, y se miran fijo a los ojos un buen rato. Después...
- ¿Más o menos como eso que estás haciendo ahora vos conmigo? ¿Estás tratando de hacérmelo? Por favor te lo pido, me da miedo. Prefiero que no me cuentes, dejá...
- Ja ja ja, no, no, está bien, vos mirá para abajo y yo te sigo contando, ¿querés? No quería asustarte, disculpame. Bueno, te decía, después cierran los ojos, extienden los brazos, y empiezan a recorrer la cara del otro con las manos, tratando de ir descubriendo las particularidades de la cara. Ahí estamos en la fase uno.
- ¿Tenía Fases? ¿Cuántas son?
- Y... según la edad de los que lo hacen, pueden ser entre tres o cuatro y hasta diez.
- ¡¿Diez?! Ahora entiendo por qué les quitaba tanto tiempo y energía. ¿Cómo aprendían todo ese proceso?
- Por ensayo y error, ¡ja ja ja!
- Eh... ensayo y error... ¿qué era?
- Es cuando hacés algo que no sabés hacer y vas corrigiendo tus errores a medida que los cometés, hasta que encontrás la manera de hacerlo bien.
- Asumo que entonces ninguno de los errores podía provocar la inhabilitación permanente de uno para iniciar un nuevo ensayo, ¿no?
- Bueno... en realidad, puede pasar cierto tiempo hasta que quieras volver a intentarlo a veces, sobre todo cuando el error no está en la técnica sino en la fundamentación teórica... je... te lo digo por experiencia...
- Humm... ¿había más de un motivo para hacerlo?
- Ja ja ja ja... pueden ser todos los motivos del mundo... amor, odio, biología, despecho, venganza, ternura, culpa, lástima, dinero, obsesión, placer, poder... lo que sea...
- No conozco nada que pueda cubrir tantos intereses... ¿Y la primera Fase la aprendiste rápido? ¿Tuviste muchos errores?
- Y... es muy difícil aprender a mirarse... y sobre todo, a dejarse mirar...
- ¿Sí? Guau... Eh... ¿Te molestaría probar mirarnos por cinco segundos?
- ¿Estás seguro? Cinco segundos puede ser punto de no retorno...
- ¿Tan rápido evoluciona el proceso? Entonces no, entonces no. Contame la siguiente Fase.
- Ja ja, la verdad es que sos entretenido vos... El próximo paso es... eh... darse vuelta, ponerse espalda con espalda, extender los brazos hacia los costados y tomarse de las manos. Es incómodo al principio, pero cuando lo aprendés, la sensación de contacto es... intensa...
- Qué raro... ¿Se podían hacer mucho daño en esa posición?
- Y sí... imaginate que siguen con los ojos cerrados... si no midieron bien la distancia al intentar apoyarse el uno en el otro pueden caerse, o hacer mal la fuerza y uno golpear al otro con su peso...
- Claro, claro, suena algo muy técnico...
- Ja ja, sí, requiere muuucha técnica...
- ¿Por qué te reís tanto?
- Ja ja ja, por nada... sos tan buen actor...
- Emm... no estoy act...
- Está bien, está bien, me gusta esta charla, sigo con el otro paso, ¿sí? Después de eso... muy lentamente abren los ojos y se sacan el calzado... ¡no! se sacan la ropa del torso... Ah, no, las dos cosas, el calzado y la ropa del torso, sí, así es...
- ¿Cuánto hace que vos no ensayás? Digo, porque hasta ahora no parece muy díficil recordar las Fases...
- Ah bue... ahora apelás a mi abstinencia... ¿se me nota tanto? Ja ja ja.
- No, no... ¿qué abstinencia? ¿Hay algo que dejaste de consumir que te hace olvidar estas cosas?
- ¡JA JA JA JA! ¡Podríamos decir que esto también puede ser considerado un bien de consumo!
- Lo sospechaba...
- Me imagino... Ja ja... bueno, en fin, a veces, a esta altura, ya sucede.
- ¿Qué?
- La posesión final. Es la cuarta fase. Antes dije que había hasta diez porque esta parte se puede repetir tanto como se quiera... o como puedan ustedes, ja ja ja.
- ¿Posesión? ¿Nosotros?
- Y sí... es una especie de pérdida de conciencia, del aquí y el ahora, un arrebato animal, una fuerza visceral que te domina y te conecta con el otro. Todo lo que viene después no te lo puedo explicar... no es que no quiera, es que no sé cómo...
- Guau... eso sonó a vulnerabilidad extrema... ¿Y el "ustedes"?
- Ja ja, sí, eso... Eh... digamos que esa posesión les afecta diferente a hombres y mujeres.... una posesión nuestra suele requerir varias posesiones del hombre para quedar liberadas... y ustedes no logran múltiples posesiones sucesivas con facilidad...
- Ah, o sea que ustedes creían que cuanto más poseído lograba estar uno, mejor.
- Exactamente. Qué rápido que aprendés, ¿eh?
- Creo que sí. Bueno, me parece que me animo a probar tres segundos de la primera Fase.
- Pero... ¿te das cuenta de que, en tu estado de carencia, tres segundos de curiosidad pueden bastar para ser poseído?
- ¿Son muchas las posibilidades de que eso pase?
- A juzgar por tus ganas de chamuyar, no creo... lamentablemente... ¿Cómo podés dar tantas vueltas?
- ¿Qué?
- Nada, nada, ya fue, probemos.
- ¿Acá?
- ¿Te parece mal? ¿No te sentís cómodo?
- Y... me da un poco de vergüenza... Tengo miedo de cometer muchos errores adelante de tanta gente.
- JA JA JA bueno, vamos a mi casa, ¿sí?
- ¿Es seguro?
- Hasta ayer había cucarachas...
- ¡¿Eh?! No, no, entonces...
- ¡Pero dale, era una broma! Vamos...
- Bueno, vamos.

***

- Pensar que varias veces estuve a punto de cansarme y dejarte hablando solo con tu historieta... ¡Menos mal que me quedé! Seis veces... ¿cómo era...? ¡Seis fases cuatro!
- Entonces... ¿lo hice bien?
- Sí, sí, podés quedarte tranquilo...
- Por mi parte, asumo que tenías muy estudiado el procedimiento... ¿me pareció, o no cometiste casi ningún error?
- Ja ja ja, qué hijo de puta...
- Ja ja, ¿tenés un pucho, eh... eh... cómo te llamabas?